El diseño de vestidores y su posterior instalación se convierte en un enorme aliado tanto para mujeres como (por supuesto) para hombres a la hora de guardar y organizar la ropa y el calzado. Incluso en muchos casos en que creemos que nuestra vivienda no dispone del tamaño suficiente para ello, acabamos encontrando un espacio bajo las escaleras , todo o parte de un pasillo, un hueco entre columnas, cuyo mejor aprovechamiento es precisamente ese: nuestro vestidor.
1. Prueba con puertas correderas
Aunque existen diversas posibilidades (abatibles, plegables, giratorias…) respecto a su apertura y cierre, el diseño de vestidores con puertas correderas se ha convertido en una opción cada vez más utilizada por sus incuestionables ventajas:
– Ganancia del espacio de apertura de la puerta en los tradicionales sistemas abatibles.
– Sistema de cierre más seguro (para los dedos de los niños más pequeños) y silencioso (para toda la casa, en general).
– Existe una variedad de puerta corredera denominada techno que carece de rieles inferiores, ideal para viviendas con suelos lisos y falta de umbrales
– La instalación de las puertas correderas no resulta más complicada que la de las convencionales, solamente es diferente.
– La variedad de diseños y una amplia gama de veteados y tonalidades se resaltan aún mas en este tipo de puertas.
2. Lo más importante en diseño de vestidores es el interior
Podemos tener el vestidor más bonito del mundo que, si no está organizado y bien aprovechado, no nos servirá de mucho. Porque su misión principal no es que luzca sino que guarde la mayor cantidad de ropa posible de la mejor forma posible de tal manera que, cuando la necesitemos, seamos capaces de encontrarla rápida y adecuadamente.
Por ello, en el diseño de vestidores debemos tener muy en cuenta la distribución interior, el tipo de prendas que vamos a albergar en él para elegir como organizarlo y los complementos (perchas multiuso, corbateros, pantaloneros, organizadores para cajones, cestas…) más adecuados.
Una opción muy útil para la distribución general en caso de vestidores compartidos es la de reservar un lateral para cada uno de los ocupantes.
Por último, cuatro cosas de las que nunca debemos olvidarnos: un zapatero, el espejo, el asiento y una buena iluminación.
3. Adáptalo al espacio disponible
Por último, recuerda que no puedes ocupar más de lo que tienes. No todos los vestidores tienen que ser kilométricos para ser útiles y coquetos:
El diseño de vestidores puede plantearse a lo largo de una única pared, en dos haciendo esquina o en paralelo, en tres en forma de U…
Podemos adaptar una habitación vacía de nuestro hogar o anexarlo al dormitorio. En este último caso, un ligero desplazamiento del lugar habitual de la cama puede hacernos ganar un espacio considerable.
De cualquier manera, y salvo algún excepcional afortunado que esté leyendo esto, debemos resignarnos a pensar que un vestidor como el de Jennifer López es un sueño bastante difícil de alcanzar.
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